Sínodo de Laodicea

Los cánones del concilio de Laodicea no fueron vinculantes para ninguna iglesia o región, únicamente para aquellos que participaron.

Sus oficiales eligieron como sucesor a Joviano en el campo de batalla.

El Sínodo expresó sus decretos en la forma de reglas escritas o cánones.

El Sínodo de Laodicea recordó a los cristianos que no judaizaran, porque así lo enseñan las Escrituras.

El canon 36 solicita la excomunión para todo aquel que practique la brujería, la magia, la adivinación o la astrología.

Los Cánones del Sínodo de Laodicea