Comisaría Regia del Turismo

[6]​ En 1921 se trasladó a la calle San Mateo, a la futura sede del Museo Romántico, aunque su contrato de arrendamiento no se firmó hasta 1923; allí permanecería hasta su desaparición como organismo, en 1928.

Alguno de los primeros asuntos que se abordaron fueron la erradicación de la mendicidad callejera y la atracción del turismo americano, para lo cual el Marqués realizó un viaje por Estados Unidos entre 1912 y 1913.

A principios del siglo XX este sector presentaba numerosas deficiencias por lo que la Comisaría trató de influir en su desarrollo.

A nivel terrestre, la red de carreteras era insuficiente y se encontraba en mal estado, lo que suponía un problema para el turismo automovilístico.

[12]​ El Marqués planteó un nuevo tipo de carretera, que llamó pista, que estaría reservada únicamente a los automóviles, evitando así que coincidieran con carros o mulas; la primera uniría Madrid y Toledo, pasando por Aranjuez, y a lo largo de su trazado habría restaurantes, hoteles, puestos de socorro o reparaciones.

[16]​ Se puso en funcionamiento un tipo de establecimiento, las hospederías, que además de poseer altos niveles de confortabilidad y modernidad, ofrecía tanto en el diseño arquitectónico como en la decoración interior una estética regional, que recordaba al marco geográfico en el que se encontraba.

Igualmente se pensaba instalar un centro de estudios americanistas en Sevilla, en la Casa Lonja.

Todo el plan se redujo, finalmente, a una Residencia de América, en Sevilla, inaugurada en 1925.

Se instalaron en edificios históricos, con diseños historicistas en su estética con el objetivo de resultar atractivos para los turistas.

Alfonso XIII había descubierto sus parajes tras una cacería en 1911 y trasladó al Marqués su deseo de atraer turismo a esa zona y potenciar, igualmente, el acercamiento a la naturaleza.

[26]​ Las exposiciones o congresos eran medio habitual para mostrar la riqueza de un país.

[27]​ El pabellón español exhibió, bajo el lema Sunny Spain, la España monumental, artística y pintoresca, y su programación incluyó ciclo de conferencias y distribución de publicaciones divulgativas, siendo en conjunto el primer intento estatal para relanzar al país al exterior.

Por tanto, desde la Comisaría se trabajó para que monumentos y naturaleza fueran frecuentados en cualquier época del año, añadiendo, además, fiestas populares, danzas y otros elementos del folklore a la política turística.

[32]​ A todos ellos hay que añadir las obras emprendidas en el barrio de Santa Cruz en Sevilla.

[33]​ La Casa de Cervantes en Valladolid se hallaba ocupada por varias viviendas, en muy mal estado de conservación, por lo que el marqués, junto con Alfonso XIII y Archer Milton Huntington compraron las casas y las donaron al Estado en 1918.

A partir de 1924 se editaron postales con motivos populares y en 1925 se celebró en Madrid la Exposición del Traje Regional e Histórico, bajo la dirección de Luis de Hoyos Sainz y cuya colección sería el germen del Museo del Pueblo Español.

Benigno de la Vega-Inclán, impulsor del turismo en España
Alfonso XIII y Benigno de la Vega-Inclán de visita en la casa del Greco
Benigno de la Vega-Inclán y Vicente Traver en las obras de las Casas Baratas de Sevilla
El parador de Gredos , en construcción
Exposición de 1914, personajes maragatos
Exposición de 1914, personajes con vestimenta española
Patio del Yeso, en el Real Alcázar de Sevilla