Claudio, el dios, y su esposa Mesalina (en inglés, Claudius the God and his wife Messalina) es una novela del escritor británico Robert Graves, publicada en 1935 como continuación de Yo, Claudio (1934).
Además, Graves trabajó con discusiones que se dice que tuvo el Claudio histórico a favor de sus políticas, como el razonamiento en favor de las letras claudias tal como lo describió Tácito.
Sin embargo, Graves fue selectivo en su uso de las fuentes antiguas (principalmente Tácito y Suetonio).
Así, en el momento del ascenso de Claudio al trono, la novela narra que lo hizo instigado por Herodes Agripa.
Una acusación usual entre los historiadores de la Antigüedad contra Claudio es que lo gobernaron fácilmente sus esposas y su liberto.
Graves rechazó esta afirmación en lo que se refería a las principales y mejores obras de Claudio, como hacen los modernos historiadores.
Graves lleva esta interpretación hasta el punto en que casi todos aquellos enjuiciados o ejecutados parecen ser inocentes de todo crimen o no merecedores de una sentencia severa.
En realidad, las razones para adoptar a un adolescente de más edad fueron con probabilidad políticas.
Graves ignoró o aceptó hechos históricos que encajasen en el hilo argumental elegido.
Graves parece haber basado su perspectiva en los eruditos victorianos, que pintaron la segunda mitad del reinado de Claudio como un fracaso.
El problema, en cualquier autobiografía de ficción, es que la persona no puede prever su asesinato, o actuaría en consecuencia para impedirlo.