Ciencia ficción en Colombia

[1]​ Durante el siglo XX, se destaca la obra de dos autores: René Rebetez y Antonio Mora Vélez, quienes alcanzaron un limitado reconocimiento nacional e internacional.Estas son obras aisladas, de muy poca repercusión en la ciencia ficción y la literatura nacional.Se dice que Cepeda Samudio afirmaba: "Todos provenimos del viejo Fuenmayor".[1]​ José Antonio Osorio Lizarazo nació en Bogotá en 1900 y murió en esta misma ciudad en el año 1964.La mejor fuente de información que se tiene sobre su vida es la entrevista realizada por Antonio Mora Vélez a Luis Martelo Sliger, sobrino del mismo, en el año 1984.En 1936 escribe la novela Viajes interplanetarios en zeppelines que tendrán lugar el año 2009, que contiene "la primera ópera espacial colombiana, el primer abordaje empírico del viaje espacial en nuestras letras, el primer texto colombiano donde aparecen algunos BEM (extraterrestre con apariencia de insecto o reptil), y un primero —y solitario— intento de explorar una terminología propia en el género independientemente de la que luego popularizarían las traducciones españolas y argentinas".No extrañan apreciaciones como esas, tratándose de CF en una época en la que nuestra patria aún vivía los rigores del atraso tecnológico.En esta ciudad es testigo del Bogotazo y estudia, entre otros, con Camilo Torres Restrepo.A los 16 años, viaja a Suiza, en donde entra en contacto con la familia de su padre, presta el servicio militar, estudia ciencias económicas, y aprovecha para llevar una vida bohemia en la ciudad de París.Durante esos años, tiene contactos con Carlos Monsiváis, Arturo Ripstein, Efraín Huertas, Vicente Leñero, Juan José Arreola, Juan Rulfo, José Luis Cuevas, Salvador Elizondo, Jorge Portilla y, principalmente, con Alejandro Jodorowsky, con quien realiza varios proyectos en conjunto.El más destacado de ellos sería la revista Crononauta, la primera publicación latinoamericana dedicada a la ciencia ficción.A comienzos de los 70s, trabaja como escritor y productor del nuevo cine mexicano.En el año 1995, su nombre aparece en la "Encyclopedia of Science Fiction" de Clute y Nichols.En el año 2008 publica su primera novela de ciencia ficción, titulada Los Nuevos Iniciados.El cuento de ciencia ficción El Asunto García ocupó el tercer lugar del Primer concurso colombiano de Ciencia Ficción (1997) y fue incluido en la antología "Contemporáneos del porvenir" (2000) editada por René Rebetez.Además, fue traducido al alemán y publicado en Und Träúmten Von Leben.Ha figurado en varias antologías de la poesía colombiana y ha publicado la novela José Antonio Ramírez y un zapato (2003)que -según Orlando Mejía Rivera- es una obra que puede clasificarse como "ciencia ficción del espacio interior" en la línea de lo escrito por J.G.Su ensayo La narrativa de ciencia ficción en Colombia publicado en Literatura y Cultura - Narrativa colombiana del siglo XX (2000) fue el primer estudio sistemático del género de la ciencia ficción en Colombia.En el 2013 ha publicado Introducción al estudio del diablo, una obra que pretende ser una visión general de la discusión actual sobre distintos temas demonológicos.En el 2016 ha publicado en formato de libro electrónico (Kindle) la novela "Planeta Homo", una historia encuadrada en la ciencia ficción LGBTI.Tras la publicación de tres poemarios, este último autor puede considerarse como el primer poeta dedicado a la ciencia ficción.Los poemas de Mora Vélez han sido catalogados por críticos como Otto Ricardo Torres como "poesía esotérica no confesional".[14]​ El autor los denomina "poemas de ciencia ficción" y los clasifica en cuatro categorías: Poemas cósmicos (dedicados a astros y fenómenos naturales), míticos (dedicados a interpretar mitos clásicos en términos de visitas extraterrestres o civilizaciones avanzadas), antrópicos (dedicados a personajes de la ciencia, la carrera espacial o la filosofía) y apocalípticos.El cine de ciencia ficción colombiano es escaso y tardío sin embargo se pueden apreciar algunos esfuerzos.[16]​ "Los Jaguares contra el Invasor Misterioso", "Karla contra los Jaguares" son dos películas mexicanas filmadas en escenarios colombianos por su bajo coste, sin embargo no participó equipo creativo colombiano en ninguna de estas dos películas.Jairo Pinilla se erige como uno de sus primeros exponentes con películas como 27 horas con la muerte (1981).Así mismo cortometrajes destacados a nivel internacional como Trikster, Alter Vu, El Último Hombre , entre otros forman parte de la filmoteca del género fantástico en Colombia.Sin embargo, todo cambia cuando Ferrán (Manolo Cardona), el jugador más veterano, descubre la verdad siniestra que el juego esconde.La historieta "Los Marcianitos" de Efraín Monroy se publica en 1982 en la revista Los Monos del periódico El Espectador.Es una historieta en tono de humor sobre dos extraterrestres que llegan a la Tierra.Gravedad 1 tiene también una precuela que desvela parte del subtexto que existe en la animación, en forma de un cómic(2018) creado por Andrés Rojas, Henry Gonzáles y Carlos Smith[18]​ "El Último Día" es un cómic sobre zombis en Bogotá del diseñador Re´em Camargo (2019)[19]​ "Heroes Latinos" es una editorial de cómics enfocada en los superhéroes inspirados en diferentes mitologías de Latinoamérica, con las que se ha constituido un sólido universo interrelacionado.