Chispero, en la jerga madrileña popular, se refería a un determinado tipo castizo de los barrios periféricos y más en concreto del Barrio de Maravillas.
[1] Dependiendo del contexto, puede ser sinónimo de herrero, chulapo, ladrón, guapo, valiente.
Galdós los define como un conjunto en este pasaje del tercer libro de los Episodios Nacionales, donde se relata el recibimiento del pueblo madrileño al rey Fernando VII, primero «Deseado» y luego «rey Felón».
Así las hace cantar Vicente Cobos en su melodrama en un acto Los chisperos de Madrid:[5]
[6][7] Pedro de Répide, recoge la fábula y la completa, descubriendo que nunca existió ese bravo chispero que en el cuadro de Álvarez Dumont acuchilla al dragón de la caballería invasora, mientras su hija, que le servía los cartuchos, muere a sus pies.