Transferencia de soberanía de Hong Kong

Este acontecimiento puso fin a 156 años de dominio británico en la antigua colonia, que comenzó en 1841.

Hong Kong se convirtió en la primera región administrativa especial de China; Le siguió Macao después de su su transferencia desde Portugal en 1999 bajo acuerdos similares.

Sin embargo, aun así el gobierno británico acabó devolviendo al gobierno chino la totalidad de la colonia de Hong Kong.

Desprevenido, Deng afirmó la necesidad del retorno de Hong Kong a China, en la que a Hong Kong se le daría estatus especial por el Gobierno de la República Popular China.

Tres años más tarde, Deng recibió al ex primer ministro británico Edward Heath.

En el mismo año, Edward Youde, que sucedió a MacLehose como el 26.º gobernador de Hong Kong, encabezó una delegación de cinco consejeros ejecutivos a Londres, incluyendo a Chung Sze Yuen, Lydia Dunn, Roger y Lobo.

A la luz de la creciente apertura del Gobierno de la República Popular China y las reformas económicas en aquel país, la entonces primera ministra británica Margaret Thatcher buscó un acuerdo con la República Popular China para una continuidad de la soberanía británica sobre el territorio; sin embargo, la República Popular China adoptó una posición contraria: no solo la República Popular China deseaba que los Nuevos Territorios, en régimen de arrendamiento hasta 1997, fueran colocados bajo la jurisdicción de la República Popular China, sino que también se negó a reconocer los «tratados injustos y desiguales» en que Hong Kong y Kowloon habían sido cedidos al Reino Unido a perpetuidad.

Por lo tanto, la República Popular China reconocía solo la administración británica sobre Hong Kong, pero no su soberanía.

Reino Unido ocupó Hong Kong en 1842, Kowloon en 1860, y los Nuevos Territorios en 1898.