Todo parece indicar que no existía una ceca o taller monetario establecido de forma permanente en la ciudad.
Por todo ello, Cartago Nova no tardará en protagonizar un papel económico, militar, político y cultural muy importante, así como a representar el símbolo del poderío cartaginés sobre Hispania.
Los romanos desembarcan en Ampurias en el 218 a. C.[6] para abrir un segundo frente en la retaguardia cartaginesa, una acción que si bien era arriesgada ante el avance de Aníbal en suelo italiano, a la postre se revelaría como decisiva.
[16] A grandes rasgos se puede dividir sus emisiones en dos partes, la primera de transición y la segunda imperial.
[17] En un análisis más detallado de su producción, Mª del Mar Llorens propone su división en XIX emisiones.
[21] Dentro de esta última emisión se acuñó un tipo particular, con retrato femenino en el reverso y con la leyenda SAL-AVG.
Es posible que represente a Salus, una divinidad tutelar de la ciudad,[8] pero no existe acuerdo entre los especialistas al respecto.