De estilo gótico-renacentista, sus bóvedas, pilares y arcos son de estilo ojival y se atribuyen a Hernán Ruiz, el Viejo, a Hernán Ruiz, el Joven (1556) y Hernán Ruiz III.
Está formada por tres naves sin crucero separadas por arcos apuntados y posee amplísimas dimensiones: 53 metros de longitud y 22 m de ancho.
Por último cabe mencionar la custodia rococó (siglo XVIII) del orfebre cordobés Damián de Castro.
Destaca también la puerta lateral barroca de mármol rosa de Cabra del siglo XVIII y la torre, cuyas obras empezaron en 1611 y terminaron en 1788.
También hay que destacar la portada principal, procedente del antiguo Convento del Carmen y que se sitúa frente a la Plaza de Santa Ana, conocida popularmente como el Paseo Viejo.