Castillo de Mirabel

Fue amigo personal del emperador al que acompañó en varios viajes.

[4]​ Era un ilustrado del Renacimiento en el que unían las facetas militares y humanísticas.

También fue Comendador mayor de la Orden de Alcántara y en 1446 escribió un libro sobre Carlos V y la guerra ben Alemania que se editó en Venecia en el año 1548.

Lo que sigue mejor conservado es una gran cámara con una importante bóveda de cañón hecha en ladrillo.

Las tronera que permanecen son cruciformes, del tipo de las usadas en Extremadura durante el último tercio del siglo XV lo que da una idea de la cantidad de fortificaciones similares que se construyeron en tan poco tiempo, unos 25 años.