Debido a su interés personal en los caballeros medievales y en su miedo constante a ser asesinado, mandó construir su nueva residencia como un castillo con esquinas redondeadas, con un pequeño patio de forma octogonal.
En 1800 se erigió al frente del castillo el monumento en bronce a Pedro el Grande, diseñado durante la vida de este y terminado en 1747 por el arquitecto Bartolomeo Rastrelli.
Sus asesinos fueron un grupo de oficiales que habían sido despedidos, encabezados por el general Benningsen.
Su hijo, el emperador Alejandro I (que en ese momento también estaba en el palacio), lo sucedió en el trono, y uno de los asesinos, Nikolái Zúbov, anunció su ascenso.
Entre 1838 y 1843, el escritor ruso Fiódor Dostoyevski estudió como cadete en la Escuela de Ingeniería.