Diseñada a petición del matrimonio del destacado médico infectologo Luis Puyó Medina y Carmela León Luco, el inmueble cuenta con un total de 3.000 metros cuadrados, abarcando un octavo de la manzana en la que se ubica, cercana a las áreas verdes que se estaban construyendo en ese entonces y que actualmente se conocen como el Parque Forestal.
Becada por el Gobierno Chileno en 1930 para ir a estudiar a Francia, se convirtió en discípula de Othon Friesz y André Lothe, se le dio la oportunidad de exhibir su obra en el Salon D’automne.
[5] Luego de un tiempo continuó su viaje a Nueva York para seguir especializándose con el pintor cubista Amédée Ozenfant.
Pintores conocidos como; Nemesio Antúnez, Ximena Cristi, Carlos Ossandón, Augusto Barcia, Aída Poblete, Carlos Pedraza Olguín, Héctor Banderas, los escultores Julio Antonio Vásquez y María Fuentealba fueron algunos de los artistas profesionales que se mantuvieron en el lugar.
Lugar que también vio florecer los talentos de Bororo, Fernando Allende y Samy Benmayor.
[7] Con los años, innumerables personajes de las artes trabajaron e hicieron funcionar sus talleres en esta casona.
Su transcendencia histórica y valor estético con un estilo neoclásico la convierten en una pieza arquitectónica única situada en el centro de Santiago.
Cuatro de las casas individuales se crearon con el fin de ser arrendadas a amigos y gente cercana a la familia, las otras dos residencias fueron utilizadas por la familia, una para vivir y la otra como consulta médica.