Pirozzini posee también una producción escrita, ya que ejerció como crítico artístico de la revista La Renaixença.En su juventud frecuentó la entidad catalanista Jove Catalunya, de la cual formó parte, juntamente con personalidades como Pere Aldavert, Lluís Domènech i Montaner y Ángel Guimerá, entre otros.Igualmente, formó parte de la comisión organizadora del Primer Congreso Catalanista (1880).El año 1884, durante una estancia circunstancial en Olot, entró en contacto, a través del pintor Joaquín Vayreda, con un exmilitar carlista, Eugenio Serrano de Casanova, que proyectaba realizar una exposición universal en Barcelona.En él, junto con Elías Rogent y Lluís Rouvière, recayó la responsabilidad de materializar la exposición, la primera del estado español, que permitió urbanizar los terrenos de la antigua Ciudadela militar.