Campañas de Azov

Pedro I de Rusia consigue una gran victoria en Azon tomando la fortaleza y permitiendo tener salida al Mar Negro.

Pedro el Grande ordenó a su ejército (de 31 000 hombres y 170 cañones) avanzar hacia Azov.

[4]​ Otro ejército ruso (120 000 hombres, en su mayoría caballería, streltsí, cosacos ucranianos y calmucos) al mando de Borís Sheremétev se dirigió a los confines del bajo Dniéper para tomar los fuertes otomanos allí y llamar la atención del Janato de Crimea.

[6]​ La caballería bajo el mando de Sheremétev (hasta 70 000 hombres) fue enviada nuevamente a los confines del Dniéper.

En 1697, un embajador ruso presente en la corte safávida planteó un problema al entregar una nota que estipulaba que «lezguinos, circasianos y otras tribus caucásicas, ostensiblemente súbditos persas», habían brindado asistencia a los otomanos durante las campañas de Azov.

El informe también incluía la solicitud de declarar la guerra a los otomanos, así como de devolver unos 300 000 tomanes a los rusos, que según el informe se le debían al zar «desde los días del shah Safi» (r.