Este registro fue roto otra vez por Chasseloup-Laubat, que aplicó un carenado rudimentario a su Jeantaud.
Jenatzy ganó en 1903 la Copa Gordon Bennet en Athy, Irlanda, al volante de un Mercedes.
Se escondió detrás de un arbusto e hizo ruidos imitando animales, para gastar una broma a sus amigos que cazaban con él.
Uno de ellos abrió fuego, creyendo que era un animal salvaje.
Jenatzy murió desangrado en ruta, cumpliendo su propia profecía de que moriría en un Mercedes.