El códice Colombino-Becker fue elaborado en Tututepec, en el actual estado mexicano de Oaxaca, durante el siglo XII."Se usó una rica paleta y el colorido tiende a la firmeza expresiva, puesto que forma parte del sistema gráfico escritural.Una línea negra delimita las imágenes, lo que proporciona una agradable claridad hasta en los más mínimos detalles."La lectura se hace en bustrófedon, comenzando por la parte inferior izquierda y ascendiendo en zig zag hasta la sección siguiente, donde se inicia el descenso con el mismo movimiento, terminando por general en la parte inferior derecha.Los verdes son una mezcla del azul maya con el mismo colorante vegetal amarillo.En 1863 el manuscrito se encontraba en posesión de Manuel Cardoso,[4] y después perteneció algunos años a Alfredo Chavero, quien lo vendió luego a Joseph Dorenberg, un comericante alemán que vivía en la ciudad de Puebla.[2] El manuscrito pasó luego a manos del Instituto Nacional de Antropología e Historia, fundado en 1939.En el 2009 el INAH permitió que se digitalizaran por completo cinco códices de su colección, entre ellos el códice Colombino, que ahora puede consultarse de manera gratuita y en su totalidad en la Biblioteca Digital Mundial.El abogado del cacique, Pascual Amazón, convenció a éste de que le permitiera quedarse con el códice.Amazón vendió el manuscrito al empresario y coleccionista alemán Philipp Joseph Becker,[4] que residía en la ciudad de Puebla.Fue Becker quien llevó el códice a Alemania, junto con el resto de su colección, que exhibió en su casa en Darmstadt, hasta su muerte en 1895.Varios autores nacionales y extranjeros, entre ellos el inglés James Cooper Clark, en 1912, lo utilizaron principalmente para reconstruir la biografía del cacique 8 Venado.
Aproximación de la gama de colores empleada en el códice Colombino-Becker.