Bosques montanos de Knysna-Amatole

Los árboles, de origen tropical y afromontano, incluyen el olivo Olea capensis, el laurel del Cabo (Ocotea bullata), Afrocarpus falcatus (familia Podocarpaceae), el mañío Podocarpus latifolius, el acebo africano (Ilex mitis), Apodytes dimidiata (familia Icacinaceae), la rapinea (Rapanea melanophloeos), la casina Cassine peragua, Ochna arborea (familia Ochnaceae), Curtisia dentata (familia Curtisiaceae), el kamasi (Gonioma kamassi), Platylophus trifoliatus y Cunonia capensis (familia Cunoniaceae).

Otros grandes mamíferos, como el búfalo cafre (Syncerus cafer), han desaparecido.

La región alberga cinco mamíferos en peligro de extinción: La musaraña Myosorex longicaudatus es casi endémica de esta ecorregión.

La degradación del hábitat, las actividades forestales y la invasión de plantas y animales exóticos, como la agresiva hormiga argentina (Linepithema humile), amenazan la supervivencia de la fauna y flora locales.

En la selva de Knysna, el 20% de la superficie está incluida en reservas naturales y parques nacionales; en los montes Amatole, el 90% está protegido.