Borchardt C-93

La C-93 fue la primera pistola semiautomática fabricada en un número apreciable y también fue la primera pistola de la historia que llevaba su munición dentro de un cargador alojado en la empuñadura.

Georg Luger, que había realizado diseños para la firma Loewe, estudió el diseño de la C-93 y produjo un pequeño número de prototipos en calibre 7,65 mm.

La producción de esta pistola fue muy limitada, siendo fabricadas sólo 3.000 unidades, la compañía Loewe fabricó 1.100 unidades y la D.W.M el resto, cesando su producción en 1899.

Con un armazón de acero fresado, su funcionamiento era por retroceso corto del cañón y cerrojo articulado (sistema Borchardt-Maxim), utilizando un sistema de disparo de percutor lanzado, controlado directamente por una leva del gatillo.

[1]​ Contaba con seguro manual en su armazón y se alimentaba desde un cargador monohilera de 8 cartuchos, que se liberaba por un retén situado en el lado izquierdo del armazón.