José Batlle y Ordoñez es considerado un precursor de la Socialdemocracia moderna, ya que si bien existía previamente el término, no es hasta 1919 (en la "ruptura" de la Tercera Internacional Socialista) donde la Socialdemocracia abandona definitivamente la ideología marxista, a la cual Batlle y Ordoñez nunca adhirió.El Batllismo, con su política nacionalizadora, su legislación social avanzada (con tintes radicales) y su economía dirigida con un puntilloso cuidado por los equilibrios macroeconómicos, logró forjar una sociedad mesocrática a cuyo recuerdo aún se aferran los nostálgicos.Sus continuadores inmediatos fueron Claudio Williman, Baltasar Brum, José Serrato, Juan Campisteguy, Gabriel Terra, Alfredo Baldomir y Luis Batlle Berres.La línea batllista fue continuada por el hijo de Batlle Berres, Jorge Batlle Ibáñez, y, posteriormente, por otros políticos como Julio María Sanguinetti, Zelmar Michelini, Aquiles Lanza, Hugo Batalla, Amílcar Vasconcellos, Renán Rodríguez, Manuel Flores Mora, Enrique Tarigo y Manuel Flores Silva.Luego del retorno a la democracia en 1985, Julio María Sanguinetti ejerció la presidencia de la República en dos oportunidades: 1985-1990 y 1995-2000.En el ejercicio de su cargo, Sanguinetti se apartó del batllismo histórico, principalmente en la conducción económica.Con vistas a las elecciones de 2019 se conforma una nueva agrupación, Batllistas, que recibió el beneplácito del expresidente Sanguinetti.