Batalla de Mohi

Cuando estos refugiados, aproximadamente 200 000 (varones, incluyendo 40 000 guerreros, mujeres, ancianos y niños),[11]​ buscaron asilo en su reino, parecía que al menos una parte había aceptado el dominio húngaro.Asimismo, denegó el derecho de los nobles a tener audiencias personales y sólo aceptó peticiones por escrito en su cancillería.Los refugiados cumanos hicieron que su posición mejorara y de paso acrecentó su prestigio entre los círculos eclesiales al convertirlos, pero también causó muchos contratiempos.Las costumbres de los cumanos, nómadas de tradición, resultaron incompatibles para convivir con los húngaros, ya sedentarios, y los nobles se quedaron anonadados cuando vieron que el rey apoyaba a los recién llegados y no a ellos.Los cumanos creían que habían sido traicionados y abandonaron el país con dirección sur saqueando todo en su camino.Muchos nobles rehusaron tomar parte en la campaña porque odiaban al rey y deseaban su caída.Ugrin Csák, el arzobispo de Kalocsa intentó también atacar a un contingente mongol, pero fue desviado con artimañas hasta unos pantanos, donde su caballería pesada quedó irremediablemente perdida.Los húngaros aún seguían sin creer que fuera un ataque a gran escala, pero las tropas del príncipe Colomán, duque de Eslavonia y hermano menor de Béla IV, y las fuerzas del arzobispo Ugrin Csák junto con el maestre templario dejaron el campamento para sorprender a los mongoles y defender el puente desprotegido.Los mongoles no esperaban en absoluto tropas de ballesteros, quienes infligieron numerosas bajas en sus fuerzas.Estaban muy desilusionados, ya que el rey ni siquiera había despachado órdenes para preparar la batalla.Sin embargo, las bajas mongolas habían sido tan numerosas que, llegado este punto, Batu no quería perseguir a los húngaros.Tras la victoria, los tártaros se reagruparon y comenzaron el asalto sistemático del resto de la nación.Según algunos cronistas medievales el ejército mongol disponía entre 50 000 y 120 000 hombres, incluyendo artillería china, pero esto es seguramente una exageración para justificar la aplastante derrota.Según historiadores chinos el ejército húngaro era de 100 000 hombres, muriendo 70 000 y siendo capturados 25 000 de estos, cifras que son también probablemente exageraciones para darle mayor valor a su victoria, además bajan las muertes mongolas a solo 1000, aunque en la actualidad se estiman perdidas mucho mayores del bando mongol.También exaltan el sacrificio de los caballeros cristianos al mencionar que los Templarios lucharon hasta la muerte sin huir.Mientras el ejército mongol era de 20 000 a 30 000, la mayoría jinetes, con artillería china, y que sufrió fuertes bajas aunque no por ellas detuvo su avance, sí lo demoró.Fue un invierno inusualmente crudo, el río se heló totalmente y tras una serie de batallas menores, los mongoles pudieron cruzarlo.Fue entonces que el rey y algunos de sus colaboradores huyeron al suroeste, a través del territorio controlado por Hungría, hacia la costa adriática, llegando al castillo de Trau, donde permanecieron hasta que los mongoles se hubieron retirado.El ejército húngaro y las tropas irregulares formadas por campesinos resultaron ser unos temibles enemigos, infringiendo cuantiosas bajas a los mongoles.A mediados del siglo XIII, el ejército húngaro había perdido ya las tácticas de los nómadas esteparios que les habían hecho anteriormente unos formidables guerreros contra los estados alemanes, Francia, Italia, Polonia, los Balcanes y los Países Bajos en los siglos IX y X.Aun así, pudieron estar a punto de derrotar al principal ejército mongol.El resto era o bien ciudades fortificadas como Székesferhérvár, viejos castillos como el de Esztergom, monasterios fortificados como Tihany y Pannonhalma o fortalezas militares como Vécs, que custodiaba una importante ruta comercial en las montañas de Transilvania.
Esquema de la batalla de Mohi.
Provincias de la antigua Hungría