Era hijo del duque Leopoldo VI y Teodora Angelina, una princesa bizantina.
Federico era conocido como el Belicoso por sus frecuentes guerras contra sus vecinos, principalmente con Hungría, Baviera y Bohemia.
[4] En 1239, en un cambio espectacular en las políticas imperiales, Federico se convirtió en uno de los más importantes aliados del emperador.
Una vez que los mongoles se retiraron de Hungría, el rey comenzó el proceso de reconstrucción del reino, sin embargo, Federico decididamente condujo varias campañas militares contra los húngaros adjudicándose la potestad sobre muchos territorios del Oeste.
Así, luego de varios enfrentamiento, el duque Federico murió en una batalla contra el rey húngaro Béla IV, junto al río Leitha.