Iglesia de Santa María del Pino

Está situada en la calle Cardenal Casañas, frente a la plaza del Pino.Otros dicen que el pino se plantó para simbolizar la pureza de la Virgen, siempre constante como el verdor del pino, o como ejemplo al entendimiento humano, que debe siempre mirar al cielo.Balaguer cita a Antonio de Bofarull, quien en su Cicerone afirma que en 1568 se plantó un pino frente a la iglesia, el cual se conservaba aún en 1800, y era tan alto como los edificios circundantes.El pino murió en 1802, a consecuencia de haberle clavado un soldado su bayoneta en el tronco.Según Víctor Balaguer en Las calles de Barcelona (1866),[1]​ a fines del siglo X ya existía en este sitio una iglesia, que debió ser derribada para erigir la actual.[2]​ En este caso, la iglesia románica debió ser más pequeña que la gótica (como ocurre también con la catedral), ya que se conservan registros de donaciones y adquisiciones de terrenos para la construcción del edificio actual.[4]​ Fue quemada en 1936 durante la guerra civil española, y se emprendieron diversas obras para reparar los desperfectos a partir de los años 1950 a cargo de Josep Maria Jujol.Entre las capillas destacables se encuentran: A partir del año 2011 está abierto al público el tesoro de la basílica que contiene importantes muestras de orfebrería como el Lignum Crucis del año 1498 o un magnífico cáliz con esmaltes llamado tradicionalmente el "Cáliz bueno" dado a la Basílica por el ilustre Dr. Felip de Malla en 1431.
Interior, altar
Interior, rosetón
El Lignum Crucis llamado del Rey Martín del año 1498