[1] Eugenio Nóbile debutó en el género del tango cuando lo contrató Augusto P. Berto para su orquesta y con ella tocó en el Café Domínguez.
[2][3] Entre 1918 y 1919 Francisco Pracánico llegó a Buenos Aires desde su San Fernando natal para debutar profesionalmente con Berto en el Café Domínguez.
En 1921 Paquita Bernardo fue contratada por $ 600.- mensuales, que en ese momento era una suma importante, para actuar en el bar "Domínguez" con un sexteto denominado "Orquesta Paquita" que además de ella integraban los jóvenes Osvaldo Pugliese al piano, Alcides Palavecino y Elvino Vardaro en violines, Miguel Loduca en flauta y su hermano Arturo Bernardo en batería.
Allí estaba Paquita, cara redonda, ojos oscuros, larga melena con rulos, blusa blanca, falda negra, sentada sosteniendo el bandoneón sobre sus rodillas, con los pies apoyados en un almohadón recamado, y el público acudía a verla y escucharla en tal cantidad que la policía debía desviar el tránsito de la calle Corrientes que, en esa época, era angosta.
Enrique Cadícamo le cantó en 1918 en un poema homónimo: Ángel D’Agostino compuso el tango Café Dominguez en homenaje al mismo.