Bala encadenada

[1]​ Al ser disparada, tras salir del cañón, los componentes de la bala revolotean en el aire y la cadena que los une se despliega.En el pasado, hasta 3 m de cadena podían atravesar el blanco.[2]​ Aunque podía infligir heridas graves, la bala encadenada no era normalmente empleada como munición antipersona; este papel era cumplido con más efectividad y menor costo por el bote de metralla o el racimo de metralla.En la actualidad, su efecto es replicado en escopetas con el uso de cartuchos bolo, dos proyectiles unidos por un alambre fuerte.Estos cartuchos están prohibidos en varias jurisdicciones, incluyendo Florida[8]​ e Illinois.
Una bala encadenada francesa.
Una palanqueta.