Bajo Guadalquivir (comarca)

[2]​ Tuvo un momento álgido en su desarrollo tras el descubrimiento de América.

[3]​ Desde finales del siglo XIX, y especialmente a lo largo del siglo XX, la comarca asiste a un proceso de desnaturalización de las marismas, que progresivamente se van desecando y roturando.

Esto originó el típico paisaje de la comarca, compuesto principalmente por arrozales, otros regadíos intensivos (algodón, maíz, girasol), canales, colectores, y poblados de colonización.

Estos poblados de colonización se crearon durante el Franquismo, y se disponen a lo largo de la inmensa marisma, muy alejados y aislados entre sí.

Ante este avance la vegetación natural ha quedado relegada a algunos espacios no cultivables como los antiguos caños de la marisma, el Paraje Natural Brazo del Este del Guadalquivir, las riberas del Guadalquivir, algunos lagunas (como El Pantano de Los Palacios), y algunas parcelas del extremo suroccidental del término de Lebrija, entre el Caño de los Yesos y el Caño de Jerez, donde la salinidad es ya tan alta que no permite cultivos rentables, dejando paso a la natural vegetación halófila marismeña.