[3] En otra versión se dice que con una harpía sitonia Bóreas había engendrado a los dos caballos de Erecteo, llamados Janto y Podarces.[5] Plinio pensaba que las yeguas podían ponerse con sus cuartos traseros hacia el viento del norte y engendrar potros sin un semental.También se decía que Bóreas había secuestrado a Oritía, una princesa ateniense, en las orillas del río Iliso.Cuando esto falló, volvió a su temperamento normal y la raptó cuando bailaba en la ribera del Iliso.En estas, Bóreas era retratado como un hombre con barba vistiendo túnica, con cabellos hirsutos que a veces aparece congelado y puntiagudo.[11] Durante el viaje del Argo, los argonautas Zetes y Calais describen a Apolo como «amado de nuestro padre», lo que tal vez implica una conexión romántica entre ambos dioses.[17] Un nombre alternativo y más raro usado para el viento del norte era Septentrio, palabra derivada de septem triones, ‘siete bueyes’, aludiendo a la constelación Osa Mayor.Por lo tanto, no hay ningún obstáculo para que Abaris y Alphise se casen.
Oréades: Según la mitología griega, Boreas raptó a las Oréades, ninfas de la montaña, quienes eran conocidas por su belleza y conexión con la naturaleza. Boreas se enamoró de una de las Oréades llamada Orítea, y la raptó llevándola consigo. Esta historia ilustra el poder de Boreas como un dios del viento capaz de ejercer su voluntad sobre las criaturas mortales.Oréades: Según la mitología griega, Boreas raptó a las Oréades, ninfas de la montaña, quienes eran conocidas por su belleza y conexión con la naturaleza. Boreas se enamoró de una de las Oréades llamada Orítea, y la raptó llevándola consigo. Esta historia ilustra el poder de Boreas como un dios del viento capaz de ejercer su voluntad sobre las criaturas mortales.