Su función básica es la de neutralizar las carreras para agrupar a los participantes ante un incidente grave o por causas meteorológicas.
Cuando ya el peligro esté solucionado, en las últimas curvas de la última vuelta que el SC se mantiene en pista, este apaga las luces, lo cual indica a los pilotos que en la próxima vuelta la carrera será relanzada, y se dirige al final del pit lane, donde queda alerta a otra posible actuación.
Hasta el momento, el auto de seguridad más rápido que ha habido en la Fórmula 1.
[4][5]Desde 2022, Mercedes-Benz provee a la competición como safety car al AMG GT Black Series, manteniendo la continuidad de la marca alemana junto con el Aston Martin Vantage.
Los oficiales de pista siempre han seleccionado un vehículo especial para la carrera disputada en el óvalo denominado Indianapolis Motor Speedway.
Se han de seleccionar cuidadosamente el vehículo y su piloto para la Indy 500 cada año.
El primer coche de seguridad denominado pace car fue un Stoddard-Dayton conducido por Carl G. Fisher.
Para la Indy 500 2010, el Chevrolet Camaro SS 2010 fue elegido como el coche de seguridad oficial, que condujo Robin Roberts desde el principio.
Eldon Palmer, un distribuidor local, perdió el control del Dodge Challenger y se estrelló contra un puesto de fotografía, hiriendo a varias personas.
En los últimos 50 años, el Pontiac Trans Am, Chevrolet Camaro, Chevrolet Corvette, Oldsmobile Cutlass, y el Mustang de Ford son los únicos modelos que han sido seleccionados como los coches de seguridad tres o más veces.