Aspectos de la meditación cristiana

Haciendo referencia a la constitución Dei Verbum el documento enfatiza que toda oración y meditación cristiana debe "proceder a converger en Cristo" y ser guiada por el don del Espíritu Santo.

Sin estas verdades, decía la carta, la meditación, que debería ser una huida del yo, puede degenerar en una forma de ensimismamiento.

El documento consta de siete secciones: El papa Juan Pablo II se refirió posteriormente al documento en discursos pronunciados en una audiencia general en 1999 y ante un grupo particular en 2003, utilizándolo como ejemplo de cómo los cristianos deben enfocar sus oraciones.

[6]​ Monseñor Michael Fitzgerald declaró en la conferencia del Vaticano sobre Una reflexión cristiana sobre la Nueva Era que la "Iglesia evita cualquier concepto que se acerque a los de la Nueva Era".

[13]​[14]​ Según la reseña del documento en The Tablet "nunca hay ninguna duda en el documento de que la Nueva Era es incompatible y hostil con las creencias fundamentales del cristianismo".

Un monje caminando en un monasterio benedictino