Asalto de Yekaterinodar (marzo de 1918)

Optó por la sorpresa al dirigir el ataque hacia el oeste, cruzando el Kubán con transbordadores por la stanitsa Yelizavétinskaya, en lugar del ataque esperado por Sorokin desde Gueórguiye-Afípskaya a través de Enem por los puentes hacia Páshkovskaya[3]​ desde el sur de la ciudad.[1]​ Motivado por estos primeros éxitos Kornílov decidió no dar tiempo a los bolcheviques a recuperarse de estas derrotas, en vista de su inestable moral, y apresurar el ataque.[2]​ Pese a que los combates prosiguieron por la noche del 28, no se consiguió doblegar la defensa de la ciudad.Tras la visita al frente, Kornílov decidió reiniciar la ofensiva para hacerse con el noroeste de la ciudad como objetivo principal.El ataque, encabezado personalmente por Márkov, fue coronado con éxito, derrotando al 1.er Regimiento de Yekaterinodar y otras unidades rojas.Se calcula que tuvieron 1500 bajas y muchos oficiales estaban heridos o habían caído en la batalla.[4]​ Los defensores gozaban de una posición ventajosa, al recibir refuerzos desde Tijorétskaya, Kavkázskaya y Novorosíisk por las tres líneas ferroviarias que no habían conseguido bloquear los blancos.El comandante Avtonómov tenía a su disposición grandes reservas de granadas y morteros que lanzaba a discreción sobre las líneas del Ejército de Voluntarios, mientras que tanto las baterías como los soldados de Kornílov tenían que racionar las municiones y no siempre podían devolver el fuego al adversario.[7]​ Por la tarde del 30 de marzo el comandante en jefe reunió un consejo de guerra al que asistieron Mijaíl Alekséyev, Antón Denikin, Iván Romanovski, Serguéi Márkov, Afrikán Bogayevski, Aleksandr Filimónov y Luká Bych, al que Kornílov invitó pese a sus desavenencias respecto a las intenciones restauradoras del Ejército de Voluntarios.Sus auxiliares insistían en que debía trasladarse, pero Kornílov menospreciaba el peligro de los proyectiles.[5]​[1]​ En su última noche el general no consiguió dormir, como atestigua su auxiliar el jefe de los Teké, Rezak Bey Jadzhíyev.Denikin fue nombrado comandante en su lugar, el cual comprendió que el golpe moral era demasiado fuerte como para seguir intentando asaltar la ciudad[3]​ y que la mejor opción era salvar a las tropas y conservar la posibilidad de continuar la lucha.
Lavr Kornílov en 1916.
Camino de Yelizavétinskaya a Yekaterinodar (marzo de 1918).
Entierro de Nézhentsev , el 31 de marzo (13 de abril) de 1918).