[1] Tanto Diodoro como Higino cuentan una historia similar: Arne o Melanipa es seducida por el dios Poseidón que la posee y queda encinta, ante lo cual su padre la repudia, pues no la creen cuando dice que es un dios quien ha engendrado en ella.
Cuando ya fueron hombres, estalló en Metapontio una revuelta y se apoderaron del reino utilizando la fuerza.
En aquellos días, Metaponto, rey de Icaria, había amenazado a su esposa, Téano, con el exilio si ésta no le daba hijos, pues sospechaba que era estéril.
Temiendo que el reino no fuera a parar a sus propios hijos, les instruyó para que, aprovechando una ausencia de Metaponto, fueran de caza al bosque con sus hermanastros y les dieran muerte.
Eolo y Beoto huyeron junto a los pastores que les habían acogido.
Los gemelos fueron en busca de Desmontes al que dieron muerte, y liberaron a su madre cuya visión fue restaurada por Poseidón.
Metaponto los aceptó de nuevo, se casó con Melanipa y adoptó a los gemelos como sus herederos.
Poseidón le devuelve al potro su forma humana dándole el nombre de Arne.
Ovidio cuenta que Arne, tras recibir el pago en oro por su traición, fue transformada en grajo.
[10] También se cree que Arne podría ser una hija de Asopo en los textos hesiódicos.