Antonio Villalba Rubio

Dos años después, en 1911, es destinado a la milicia voluntaria de Ceuta[5]​ y más tarde al teatro de operaciones con base en Melilla, incorporándose a la columna volante del general de brigada Fernando Molto,[6]​ con la que entró en combate en numerosas ocasiones.La Guerra de Marruecos[8]​ estaba en pleno apogeo y el capitán Antonio Villalba se ve inmersa en ella, al igual que sus hermanos, combate en ella hasta la victoria final de las fuerzas españolas y la pacificación total del territorio marroquí asignado como Protectorado a España.Destinado en Tropas de la Policía Indígena y en su subinspección hasta 1923, combate por toda la zona del Protectorado ganándose la estima de sus superiores, recibiendo numerosas condecoraciones, felicitaciones y distinciones oficiales.En estos años coincide con su hermano José Villalba Rubio, que posteriormente combatiría en la guerra civil en el bando republicano.La conveniencia de intensificar la acción política en la zona[12]​ era muy necesaria y el capitán Antonio Villalba desempeñó la labor con brillantez.Ante esta situación comienza una ofensiva española al mando del mando del general Berenguer[16]​ que intenta socorrer al general Silvestre,[17]​ que se encontraba en serios aprietos, socorro que no llegó a tiempo, en el estado mayor de dicha columna de apoyo van destinados José Riquelme y López-Bago y Antonio Villalba .En este puesto de ayudante del Alto Comisario estará casi dos años, años en los que viaja y conoce a todas las autoridades del Protectorado, hasta su cese en febrero de 1933.[23]​ Será entonces destinado a la Inspección de Intervenciones y Fuerzas Jalifianas.