Luis Bermúdez de Castro

En 1878 se matriculó en la Academia Militar, y con el grado de alférez participó en la campaña de Cuba.

Posteriormente, estuvo destinado cinco años en África.

En 1919 fue designado general, destinado a Oviedo, como gobernador militar, logrando que la administración central adquiriese la quinta del Rubín para cuartel de ingenieros y el seminario para cuartel de infantería, el cuartel Pelayo, en 1920.

Fue autor de numerosos escritos militares en revistas especializadas, como Ejército.

Tras la Guerra Civil, en la que combatió en el bando nacional, fue ascendido a teniente general y fue designado director del Museo del Ejército y presidente del patronato de las Ruinas del Alcázar de Toledo.