Esta última, aunque es también un acortamiento doloroso e involuntario de un músculo, es más duradera (su duración habitual es de entre cinco y diez días)[2] y menos dolorosa que un calambre muscular; además, el alargamiento o masaje no alivia los síntomas.
[4] Los espasmos musculares se diagnostican por la presencia de músculos tensos o duros que son muy sensibles al tacto, y no existen estudios imagenológicos ni exámenes de sangre que puedan ayudar a diagnosticar este padecimiento.
[cita requerida] Existen dos clasificaciones básicas: Los espasmos musculares suelen suceder después de un ejercicio intenso y con gran actividad muscular.
[7] Además de magnesio se ha sugerido que otros electrolitos, como el calcio o el sodio, podrían estar implicados.
Esto explicaría por qué estirar los músculos después de hacer ejercicio previene los calambres.
[cita requerida] Al primer signo de espasmo muscular, se recomienda suspender la actividad e intentar estirar (ej.
Después del tratamiento inicial, se debe determinar la causa del espasmo para evitar que recurra y si existe compromiso de un nervio irritado, es posible que sea necesario recurrir a la fisioterapias o incluso a una cirugía.
Buen pronóstico gracias a los factores antes mencionados: hidratación isotónica, antiinflamatorios, calentamiento antes de realizar una actividad física o deportiva (calistenia), terapia manual (no es sólo masajes, sino un abordaje integral de las patologías músculo esqueléticas, articulares, etc.).