Anastasio de los Reyes

Como las juventudes de otros partidos, de izquierda y derecha, estas organizaciones tenían un carácter paramilitar, iban uniformadas y recibían formación militar.Se produjo un tiroteo, resultando alcanzado el alférez, herido mortalmente en el hígado, dos de sus compañeros y otros asistentes al acto, entre ellos varias mujeres y un niño.Ante tal previsión se optó por silenciar en lo posible el hecho con acciones tan curiosas como la censura de la esquela que se publicó al día siguiente en el diario ABC.El hecho fue comunicado inmediatamente al jefe de la Guardia Civil, el general Sebastián Pozas, director general de la misma, que acudió rápidamente al depósito.Este ataque produjo diversos heridos de gravedad, entre ellos José Rangel, que falleció días después.Los asistentes tienen que tirarse en diversas ocasiones cuerpo a tierra o parapetarse detrás de los árboles del paseo.Incluso peleas con simpatizantes de izquierda que saludan el paso del cortejo puño en alto.Los participantes más exaltados piden a gritos ir con el difunto hasta las puertas del Congreso, donde se celebraba sesión parlamentaria en aquellos momentos.También habían marchado ya al Congreso los señores Calvo Sotelo y Gil Robles, que dieron cuenta de los incidentes.[2]​ Otro herido grave en esta intervención, y al que se dio por fallecido durante un tiempo, fue el joven carlista José Llaguno Acha.