El viajero chino Hiuen Tsiang la llamó To-na-kie-tse-kia (639), y entonces hacía unos 100 años que estaba desierta; es probablemente la Rahmi de los árabes.
Tras la desaparición del budismo se impuso el culto a Shiva.
Después de los Shatavahana gobernaron los Ikshwakus, y después los Pallava; posteriormente la zona estuvo en manos de los Chalukya y los Chola, pasando más tarde a los Kota, que fueron sometidos por los Kakatiya en el siglo XI.
Sin embargo, a partir del siglo XII fue desmantelado su mármol para construir los palacios de los majarashas, y en 1797 fueron demolidos sus restos para la construcción de la villa moderna.
La escultura se caracterizó por una composición centrada y personajes colocados generalmente en grupos, sin dejar apenas espacios vacíos, con una peculiar sonrisa en los rostros femeninos, y reinterpretando los estilos anteriores en un lenguaje ecléctico.