El regimiento estaba estacionado en Esslingen am Neckar, donde Alejandro habitaba el palacio Obere Palmsche.
Allí se encontraba con poetas como Emma Niendorf, Gustav Schwab, Justinus Kerner, Ludwig Uhland y Hermann Kurz.
Tuvo una gran amistad especialmente con Nikolaus Lenau, con quien compartía estados de melancolía y depresión.
Sufría de dolores de cabeza crónicos y se trasladó a Italia en 1843, en un vano intento por mejorar su salud.
Entre sus obras se encuentran la colección lírica Voces de la época (Stimmen der Zeit), la comedia incompleta Salvator Rosa en Roma, junto a poemas individuales y cartas a personalidades como la condesa María de Taubenheim y Carl Christian Friedrich Weckherlin.