Sin embargo es frecuente encontrar tableros con el blanco en la casilla central y dos colores (en lugar de usar el negro o el «oscuro»), pero es una configuración menos recomendable.
[2] Las piezas de ajedrez necesarias para el juego son las habituales, incorporando un alfil y un peón adicionales.
Aunque la teoría no está tan desarrollada como en el caso del ajedrez ortodoxo, Gliński ya estudió algunas aperturas, describió el mate más corto posible (mate del loco, en cuatro movimientos) y estudio de los finales[3] que más tarde han sido estudiados en detalle por Dave McCooey con ayuda de computadoras, confirmándose el hecho de que, aunque los movimientos son complicados, es posible el mate a un rey solitario usando tan solo dos caballos.
Dave McCooey y Richard Honeycutt desarrollaron otra variante de ajedrez hexagonal.
Esta regla se aplica cuando un peón enfrentado a otro (es decir, en la misma columna y casillas contiguas) realiza un movimiento a una de las dos casillas posibles esquivando al peón al que se encuentra enfrentado; en el siguiente movimiento podrá ser capturado por este, que por tanto realizará una captura con un movimiento ortogonal (tal como capturaría un peón en el ajedrez de Gliński).
En los movimientos dobles o triples de los peones pueden ser capturados al paso.
Puede darse el caso (aunque extremadamente raro) en el que se realice una captura al paso del peón esquivo: cuando un peón en una casilla inicial se encuentra enfrentado a otro y realiza un movimiento doble o triple esquivándolo; en este caso podrá ser capturado al paso por la regla del peón esquivo (ortogonalmente).
Existe un movimiento de enroque, casi anecdótico puesto que no es especialmente ventajoso, que permite al rey desde su posición inicial realizar un movimiento de caballo situando una torre inmediatamente a su costado.
En algunos casos los resultados para el tablero de 91 casillas son extrapolables al tablero de 169 casillas, pero existe alguna excepción notable:[7] Para las piezas incorporadas en C'escacs (dragón, pegaso): Inventado por el geólogo soviético Isaak Grigorevich Shafran en 1939 y registrado en 1956 quedó eclipsado por el éxito que en su momento tuvo el ajedrez de Gliński, y más en concreto por su éxito en occidente (Londres).
El tablero tiene forma de hexágono irregular, con nueve columnas y diez filas; en total 70 casillas.
Hay cuatro enroques posibles, largo o corto con cualquiera de las dos torres, pero el movimiento no ofrece especiales ventajas y es más bien anecdótico.
Suelen incluir tres alfiles por bando para cubrir todas las casillas del tablero.
El ajedrez a tres bandas fue diseñado por el profesor Richard Harshman como un experimento neurológico.
La primera variante de ajedrez hexagonal publicada fue un juego comercial denominado Hexagonia.
[13] Los ajedreces para más de dos jugadores (existentes desde el Chaturanga, el abuelo del ajedrez) incorporan la diplomacia como factor dominante en lugar de la estrategia, por lo que se desvían mucho más del ajedrez ortodoxo que otras variantes.
[14] En esta variante el tablero se posiciona horizontalmente situando cada jugador sus piezas en laterales opuestos.
Los peones tienen entonces dos movimientos posibles hacia delante (delante izquierda o delante derecha) y tres movimientos diagonales de captura posibles (uno de ellos directamente en frente), siendo esta precisamente la motivación para este diseño puesto que en el ajedrez hexagonal habitualmente el peón es la única pieza que no incrementa su capacidad de movimiento.