Y la Moneda Telemática Nominativa Comunitaria (MTNC) puede ser la solución, pues no nos hace honestos por convicción sino por sistema.
A los catorce años conoció el banquero Horace Finaly, del cual recibió una fuerte influencia durante los siguientes catorce años, y quien le aconsejó estudiar Química, carrera que Agustí Chalaux hizo en la Escuela de Química de Mulhouse.
Tuvo contacto con grupos políticos catalanistas primero y libertarios después.
Fue asiduo lector de la publicación «La Semana Internacional»,[4][5][6] que Joan Bardina i Castarà editaba desde Chile, del cual también recibió su influencia.
[7] En el año 1956, con la ocupación de Hungría, dedujo que la violencia era un camino inviable para imponer un cambio político.