Los reducidos pobladores del litoral se abastecían de vertientes locales: Cobija, La Chimba, Paposo.
Paralelamente, se produce un fuerte desarrollo salitrero en la depresión intermedia, asociado al nacimiento y auge del ferrocarril.
Esta empresa convertida en Ferrocarril de Antofagasta a Bolivia (FCAB), construye la primera aducción para transportar agua cordillerana hasta el litoral en el año 1892.
Esta obra mejoró principalmente la situación de Calama y poblados intermedios, dejando mayores excedentes para Antofagasta.
Esta aducción se complementa en el año 1962 con aguas provenientes del río Hojalar.
A partir del año 1978 las aguas de Linzor se destinan en Chuquicamata sólo para uso industrial, en conjunto con aguas salobres de los ríos San Pedro Inacaliri y Salado.
La población recibe desde ese año aportes de lnacaliri (60%) y Colana (40%).
En cambio, en el mes de junio se presenta la demanda más baja, con 0,87 veces el promedio anual.