La actitud positiva (en inglés positive mental attitude, PMA) es un concepto introducido por primera vez en 1937 por Napoleon Hill en el libro Piense y hágase rico.
En realidad, el libro nunca utiliza el término, pero analiza la importancia del pensamiento positivo como factor que contribuye al éxito.
Destacan la importancia de la autorregulación y la atención plena (mindfulness) para fomentar una actitud positiva.
Esta actitud se considera un centro de control interno que influye en factores externos.
[10][11] Un estudio realizado con personas portadoras del virus del sida (VIH) encontró que una alta autoeficacia en salud, una estrategia de afrontamiento orientada a las tareas y una actitud positiva eran fuertes predictores de un estilo de vida que promovía la salud y que tuvo un efecto significativo en la salud general y en la supervivencia.