Aceña (antigua cenia), término de origen árabe, denomina un complejo hidráulico utilizado en la península ibérica desde el siglo VIII.
[2] Por su parte, Pierre Cuvillier localiza dicha evolución en la Cataluña del siglo XIV.
[9] El primer molino de eje vertical ‘evolucionado’ que aparece representado, está datado en 1430 y localizado en Bohemia;[10] medio siglo después el arquitecto, escultor y pintor sienés Francesco di Giorgio los pintó en la Italia de 1475, periodo en que también los representaría Leonardo (1452-1519).
Este artefacto permitió además modificar la altura o nivel del agua en su encuentro con la rueda para conseguir con el salto una mayor presión, o al menos el volumen suficiente en los ríos pequeñas y/o de caudal estacional.
—¿Qué diablos de ciudad, fortaleza o castillo dice vuesa merced, señor?