El monumento está dedicado al dramaturgo catalán Serafí Pitarra, seudónimo de Frederic Soler i Hubert (Barcelona, 1839 - ibídem, 1895), considerado el fundador del teatro catalán.[1] El monumento se erigió en la plaza del Teatro, en la Rambla, donde antes se situaba la Fuente del Viejo, que fue trasladada al Parque de la Ciudadela y, posteriormente, a la Plaza de Sants.El conjunto fue criticado por su grandilocuencia y ampulosidad, y el Ayuntamiento estuvo a punto de trasladarlo a Montjuic en 1935; pero la popularidad del autor y su relación con las artes escénicas le hicieron permanecer en su sitio hasta hoy día.Sobre esta columna se halla el personaje, sentado sobre las máscaras de la comedia y la tragedia, con la cabeza girada y actitud introspectiva, como esperando que le llegue la inspiración para ponerse a escribir, sensación que corrobora el hecho de que sostenga un papel en la mano.El estilo de la obra es modernista, más evidente en el recargado pedestal que no en la figura del dramaturgo, que es más sobria y serena, hecho que en cambio se aleja de la trayectoria habitual de Querol, más propensa al monumentalismo.