La mayoría de los vocablos del libanés son árabes, pero como ocurre con todos los dialectos de la región, se ha enriquecido con aportaciones del turco desde el siglo XVI, cuando la región estaba gobernada por los turcos otomanos.
Muchos libaneses, especialmente grupos radicales de derecha como los Guardianes de los Cedros, consideran al árabe libanés una lengua separada.
El árabe libanés raramente es escrito, excepto en novelas donde el dialecto está implicado o en algunos tipos de poesía que no utilizan el árabe clásico en absoluto.
Las publicaciones formales en Líbano, tales como los periódicos, son escritos en el árabe clásico estándar.
El poeta y filósofo Saïd Akl propuso el uso del alfabeto latino, pero no tuvo aceptación general.