Se estima que hacia 1881, al momento de iniciarse la colonialización moderna del archipiélago, vivían en total unos cuatro mil indígenas selknam, estando aproximadamente la mitad en territorio chileno, y la otra mitad en territorio argentino.
A fines del siglo XIX, la explotación del oro en ríos sureños y el explosivo desarrollo de la ganadería aumentaron progresivamente la cantidad de colonos en el sector.
Esto, sumado especialmente al genocidio selknam y la introducción de enfermedades infecto-contagiosas foráneas, provocó una rápida y crítica disminución de la población.
Hacia 1966 solo quedaban trece indígenas de origen selknam, en su mayoría mestizos, en el sector argentino del archipiélago.
[3] Sus testimonios fueron documentados por la antropóloga franco-estadounidense Anne Chapman, especializada en el estudio de los pueblos fueguinos.