Álvaro de Zúñiga y Guzmán

[1]​ De este primer matrimonio de Álvaro nacieron nueve hijos: Viudo Álvaro, se casó en 1458 con dispensa por bula del papa Pío II y provisión real del rey Enrique IV con su sobrina, Leonor Pimentel y Zúñiga, hija de su hermana Elvira con Juan Alonso Pimentel, conde de Mayorga.

[14]​ Álvaro de Zúñiga es insinuado en nombre del rey que acuda a Burgos.

Los servidores del válido se defendieron a flechazos durante 3 horas.

Al fin el válido y sus partidarios acabaron por rendirse.

Los jueces se ponen de acuerdo sobre la pena de muerte del válido, pero que la pena sea aplicada por mandato y no por sentencia.

Álvaro de Luna conservó una serenidad elegante y soberbia en camino al cadalso.

Fue su primer válido Juan Pacheco, I marqués de Villena, quien se educó y crio en el palacio real, compañero desde su niñez del rey Enrique IV.

La princesa Blanca era la hija del rey Juan II de Navarra y Aragón.

El papa Pio II sucesor de Calixto III concedió la dispensa.

Quién fue bautizada y su madrina fue la princesa Isabel, la futura reina Isabel I “la Católica”, hermana de Alfonso y hermanastra del rey Enrique IV.

A principios de 1464 el rey Enrique IV lo nombra su válido.

[31]​ El rumor propagado por los nobles contrarios al rey, instigados por Juan Pacheco, marqués de Villena atribuye que la niña Juana es fruto del adulterio de la reina Juana con el mayordomo y válido del rey Enrique IV, Beltrán de la Cueva.

Los campesinos de las aldeas vecinas vinieron a defender al rey.

De acuerdo a ella, la nobleza recibía un “habeas corpus”.

[6]​ El rey Enrique IV envía un ultimátum a la liga desde Salamanca en abril de 1465, exigiendo la devolución del infante Alfonso.

Los nobles le leyeron a su soberano y señor la larga lista de sus tremendos crímenes.

[46]​ En el invierno del 1465 al 1466 la guerra civil degeneró en una completa anarquía.

Los Infantes Alfonso e Isabel son los hijos del segundo matrimonio del rey Juan II de Castilla y León con la princesa Isabel de Portugal, prima del rey de Portugal, Alfonso V y de su hermana la reina Juana, esposa del rey Enrique IV.

La reina Juana protesta en Buitrago el 24 de octubre der 1468 y no reconoce a la Infanta Isabel como sucesora.

[53]​ El rey Enrique IV asedia Trujillo, pero la ciudad se negó a incorporarse al señorío del conde de Plasencia Álvaro de Zúñiga.

El duque de Arévalo extendió su influencia en Extremadura, colocando familiares en sitios claves.

Desde entonces se afiló este hijo entre los partidarios de la princesa Isabel.

[63]​ La casa de Zúñiga tenía posesiones en Béjar, Plasencia, Peñaranda de Duero, Arévalo y Burgos fuertemente armadas y era en esta zona omnipotente.

[71]​ El rey Alfonso V y su ejército toman Arévalo, donde Alfonso V pierde el tiempo analizando los planes de lucha.

El rey Alfonso V se retira y da fin a las luchas de la guerra civil.

La reina Isabel I tenía presente que los Zúñiga le habían prestado innegables servicios, que compensaban la rebelión inicial y no podían ser olvidados.

[80]​ Los acuerdos principales del pacto entre la Casa de Zúñiga y la reina de Castilla, Isabel I, fueron: El duque de Arévalo castellaniza el nombre del linaje conocido en el pasado como Stunica / Stúñiga / Estúñiga en Zúñiga.

El rey Alfonso V y su ejército abandonan Toro en mayo de 1476.

La reina Isabel I permaneció en Tordesillas con su ejército vigilando la zona.

Los duques, personajes cultos del renacimiento, hicieron además instalar un colegio para remediar la ignorancia, que los hombres de Extremadura gozaban, más diestros en armas que en letras.

Antonio de Nebrija impartiendo una clase de gramática en presencia de Juan de Zúñiga y Pimentel, hijo de Álvaro de Zúñiga y Guzmán. Introductiones Latinae , 1486. Biblioteca Nacional . Madrid .