[3] Tras la crisis que dio lugar a las taifas, la fortificación fue un objetivo estratégico para la Reconquista cristiana, que llevó a cabo definitivamente el reino de León en 1213.
Pero el estado actual del templo es, sobre todo, el resultado de las reformas llevadas a cabo en el siglo XVIII por el arquitecto Manuel de Lara Churriguera, quien también ejecutó las obras del atrio.
[3] En el Antiguo Régimen, esta no era la única parroquia de la villa, sino que también tenía estatus parroquial la iglesia de la Encarnación, que con el tiempo acabaría en desuso.
El actual edificio, construido totalmente con sillería, data principalmente de las reformas realizadas a partir del siglo XVI, con escasos elementos medievales, lo que le da un aspecto principalmente barroco.
Enmarcada por dos contrafuertes se abre la portada con arquivoltas sobre capiteles con decoración vegetal apoyados sobre columnas exentas.
Un rosetón, un alero con canecillos y dos ventanas caladas completan el sencillo conjunto.