[1] Se presentan como una situación de malestar en la parte superior del estómago y en ocasiones con una sensación desagradable en la garganta, obligando al paciente a expulsar emesis que frecuentemente no se da.
[2] Si el paciente presenta náuseas con frecuencia, es necesario investigar el origen de las mismas, para poder instaurar un tratamiento adecuado.
Las náuseas pueden disminuir evitando alimentos sólidos, y farmacológicamente empleando antieméticos.
No se debe comer demasiada comida, pues el estómago se llena de alimentos y los jugos digestivos aumentan, y ya que estos tienen mayor peso que la comida, esta asciende al esófago, produciendo molestias y dando lugar al vómito gradual, que es la náusea más común.
Otra posible causa de náuseas no asociada a enfermedad alguna pudiera darse como reflejo ante algún estímulo extremadamente desagradable, como percibir un mal olor por un tiempo prolongado o simplemente visualizar algo escatológico o que produzca repulsión o asco.