Está situada sobre la orilla derecha del río Osiotr, un afluente del Oká, a 136 km al sudeste de Moscú.
En el siglo XIX la ciudad dependía sobre todo del comercio de productos agrícolas.
Su declive empezó tras la apertura de una nueva vía comercial en 1847 y del ferrocarril en 1864, ya que ambos pasaban lejos de la localidad.
El kremlin de Zaraisk ha sobrevivido y se conserva bastante en buen estado.
Como ya se ha dicho, Zaraisk no cuenta con una conexión de ferrocarril propia (la estación más cercana, en la vía Moscú-Riazán, es Lujovitsy), sin embargo está conectada por autobús, en otras ciudades vecinas, con Moscú, Riazán y Kolomna.