Antes de ingresar a la universidad participó brevemente en talleres literarios dirigidos por Agustín Ramos y Elena Poniatowska.
Su primera obra, Trabajos del reino (2003), fue acreedora de varios galardones, entre los que destacan el Premio Binacional de Novela 2003, en México; y el premio Otras voces, otros ámbitos del año 2008, en España.
[3] Su novela más reciente es La transmigración de los cuerpos, publicada por la editorial Periférica en el 2013.
[5] Yuri Herrera ha reflexionado acerca de la labor literaria en diversas entrevistas.
Dirigiéndose al periódico ecuatoriano El Telégrafo, el autor manifestó lo siguiente: “Las virtudes y posibilidades de la literatura no están en su capacidad para reflejar la realidad, sino en su capacidad para poner la luz sobre ciertos temas que no aparecen en otras formas de escritura o que no aparecen dentro de la esfera pública cotidiana.
La literatura no sirve tanto para denunciar como para reflexionar y mirar desde otro lugar la realidad”.
[7] Algunos críticos han opinado que esta ausencia de referentes directos a los espacios y temáticas motiva al lector a rellenar los espacios en blanco, provocando un sentimiento de incertidumbre y ambigüedad.
Christopher Domínguez Michael argumenta, en una columna para Letras Libres, que dicha novela resuelve la polémica que se ha sostenido en torno a este género, pues su estilo es “acorde con el lirismo seco de Rulfo”.
[18] No obstante, en la misma entrevista, Herrera reconoce la utilidad de la etiqueta: "supongo que es muy útil en ciertos entornos, el académico por ejemplo, y que por otro lado sí hay una cantidad de libros que específicamente, sobre todo desde el periodismo, toman el narcotráfico como núcleo de su trabajo”.