Yemelyán Mijáilovich Yaroslavski (del ruso: Емельян Михайлович Ярославский) se llamaba realmente Minéi Izráilevich Gubelman (Миней Израилевич Губельман).
Fue un revolucionario ruso judío, funcionario del Partido Comunista, periodista e historiador.
Fue detenido en 1907, condenado a trabajos forzados en la prisión de Gorny Zerentuy, en la región de Nérchinsk, y posteriormente deportado a Siberia Oriental.
En los meses que siguieron a la Revolución de Octubre, Yaroslavski se asoció con la tendencia Izquierda Comunista, que se opuso a la solución negociada de las hostilidades militares con el invasor ejército del Imperio alemán.
[4][4] A lo largo de su carrera como funcionario del Partido Comunista Yaroslavski estuvo presente en las juntas directivas de varias de las principales publicaciones soviéticas, incluyendo el diario del Partido Comunista, Pravda, y la revista teórica del Partido, Bolshevik.
[4] Una segunda y más ampliamente difundida biografía de Lenin, escrita por Yaroslavski, Zhizn i rabota V.
[7] Más tarde, ese mismo año, la Academia condenaría oficialmente a Riazánov como " agente menchevique contrarrevolucionario", lo que condujo a su arresto y exilio lejos de la ciudad de Moscú.
Obedientemente promovió la nueva línea política nacionalista del gobierno y escribió un artículo para el Pravda titulado "Los bolcheviques, continuadores de la mejor tradición patriótica del pueblo ruso", que declaraba a los bolcheviques los "herederos legítimos del gran y honorable pasado del pueblo ruso" y reconocía el lugar de la "gran nacionalidad rusa a la cabeza de los demás pueblos de la URSS".
[11] El alto perfil del artículo de Yaroslavski en el Pravda, junto con un artículo patriótico y nacionalista similar del jefe del Agitprop, G. F. Aleksándrov, se tomó como una señal oficial a los historiadores para que rescataran el pasado de la Rusia Imperial como ejemplo de unidad heroica y defensa nacional, y lo transformaran en útil propaganda para ayudar a la URSS en su esfuerzo para rechazar a los invasores nazis alemanes.