Participaron 21 países con sus respectivos gobiernos, bajo el gobierno del presidente Carlos Mesa.
Además asistieron la reina Sofía de Grecia y el Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan.
La controversia que se desató en esta Cumbre fue la complicación de las relaciones diplomáticas y bilaterales tanto entre Venezuela, Bolivia y Chile cuando el presidente de Venezuela Hugo Chávez en uno de sus discurso dijo: "Que algún día le gustaría bañarse en una playa boliviana porque Bolivia tuvo su mar", en aquel entonces los discursos fueron apoyados por Evo Morales, en ese entonces diputado cuando en Chile gobernada el expresidente Ricardo Lagos.
Al parecer esto fue el inicio, a que esta vez Bolivia y Chile se complicaran las situaciones sobre todo bilaterales y luego buscarían una solución por el problema marítimo, incluso cuando Morales en una entrevista afirmó "enfrentarse con Chile bélicamente", ya que el presidente Lagos lo consideró irrelevante y uno de los miembros del gobierno de aquel entonces, dijo que Bolivia tendrá su mar, pero un mar de sangre.
Después de la controversia, todo retornó a la normalidad pero quedando en agenda el problema marítimo.